1/3/16

La última cena

 última cena
 El día de los panes sin levadura, en que se debía hacer el sacrificio pascual, Jesús envió a Pedro y a Juan con este encargo: Vayan a preparar lo necesario para comer en la Pascua.

Ellos le preguntaron: ¿Dónde quieres que la preparemos?

Él les contestó: Al entrar a la ciudad encontrarán a un hombre que lleva un cántaro de agua. Síganlo hasta donde vaya. Y dirán al dueño de la casa: El Maestro pregunta: ¿dónde está la sala para comer el cordero pascual con mis discípulos? El les mostrará en el piso alto una sala arreglada. Preparen allí todo.

Fueron y hallaron como les había indicado. Y prepararon la Pascua.




Al llegar la hora, Jesús se sentó a la mesa con sus Apóstoles y les declaró:
- ¡No se imaginan cuanto he deseado comer esta Pascua con vosotros antes de padecer! Les aseguro que sólo volveré a comerla cuando se realice la Pascua perfecta en el Reino de Dios.

Después tomó pan y recitó la bendición; lo partió y se lo dio diciendo: Este es mi cuerpo, que será entregado por vosotros. Haced esto en memoria mía.

Y después de cenar, hizo lo mismo con el cáliz, diciendo: -Bebed todos de él, porque esta es mi sangre que sella la Alianza, y será derramada por muchos, para el perdón de los pecados.

Imágenes de la última cena
 recopiladas de la web


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Dibujos para colorear de la última Cena
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Maqueta de la última cena 
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Maqueta de la última cena

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 La última Cena




La última Cena
Una linda canción


Unas cuantas velas, alumbraban el sencillo hogar,
sobre una humilde mesa, la pascua se iba a celebrar.
Un pan sin levadura, vino de uva no podía faltar,
todo estaba listo, la cena habría de comenzar.
Ahí estaban sentados los doce junto a El,
admirando su franqueza, contemplando su pureza,
parecía toda tan perfecto y especial.
Jesús tomo el pan y, lo partió diciendo
este es mi cuerpo entregado por ustedes,
cómanlo en memoria mía.
Después tomo el vino, lo repartió diciendo
esta es mi sangre derramado por ustedes, tómenla en alianza mía.
Era una gran cena, nadie podía imaginar que ese mismo día
alguien lo iba a traicionar.
 Noooo
Ahí estaban sentados los doce junto a El
admirando su franqueza, contemplando su pureza,

 a partir de ese momento comenzó
la entrega de la pasión

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