Como no creer en Dios un tema que nos hace reflexionar que Dios esta en todos lugares y acompañandonos siempre en los momentos más dificil y felices de nuestras vidas
9/5/16
Como no creer en Dios
Como no creer en Dios un tema que nos hace reflexionar que Dios esta en todos lugares y acompañandonos siempre en los momentos más dificil y felices de nuestras vidas
Oración Ave María de Juan Pablo II
¡Dios te salve, María!
Te saludamos con el Angel: Llena de gracia.
El Señor está contigo.
Te
saludamos con Isabel: ¡Bendita tú entre las mujeres y bendito el fruto
de tu vientre! ¡Feliz porque has creído a las promesas divinas!
Te saludamos con las palabras del Evangelio:
Feliz porque has escuchado la Palabra de Dios y la has cumplido.
Dibujos Bienaventuranzas
Dibujos para colorear de las Bienaventuranzas
(Fuente de la web)
Bienaventurados los pobres de espíritu, porque de ellos es el Reino de los Cielos.
Maternidad Divina de María
La Maternidad Divina de María significa que María es Madre de Dios. La palabra utilizada en griego fue Theotokos, que significa: la que dio a luz a Dios. Ella dio a luz a alguien que es Dios; hombre verdadero y Dios verdadero.
El origen de Jesucristo es divino; engendrado del Padre antes de los siglos, desde la eternidad, pero hecho hombre por la encarnación en María. Ella es su madre, y por lo mismo es Madre de Dios, puesto que Jesucristo es Dios.
El origen de Jesucristo es divino; engendrado del Padre antes de los siglos, desde la eternidad, pero hecho hombre por la encarnación en María. Ella es su madre, y por lo mismo es Madre de Dios, puesto que Jesucristo es Dios.
Dibujos María visita a su prima Isabel
Dibujos para colorear de la Visita de la Virgen María a su prima Santa Isabel
(recopiladas de la web)
María visita a su prima Isabel
Por entonces María tomó su decisión y se fue, sin más domora, a una ciudad ubicada en los cerros de Judá.
Entró en la casa de Zacarías y saludó a Isabel. Al oír Isabel su saludo, el niño dio saltos en su vientre, Isabel se llenó del Espíritu Santo y excalmó en alta voz: "¡Bendita tú eres entre las mujeres y bendito el fruto de tu vientre!
¿Cómo he merecido yo que venga a mí la madre de mi Señor?Apenas llegó tu saludo a mís oídos, el niño saltó de alegría en mis entrañas. ¿Dichosa tú por haber creído que se cumplirán las promesas del Señor!"