Sucedió
que a medianoche Dios hirió de muerte a todo hijo mayor del país de
Egipto, desde el primogénito del Faraón, hasta el primogénito del preso
de la carcél, y a todos los primeros nacidos de animales.
Después le dijo también a Moisés: Cada familia hebrea matará un animal de su ganado, y con la sangre de ese animal señalará las puertas de su casa. Y los hebreos cenarán esa carne asada al fuego, con un pan sin levadura, que se llama pan ácimo, y con lechugas amargas. Lo comerán de pie, con un bastón en la mano. Esta noche la recordaréis siempre. Es la Pascua , el paso de Dios.
Aquella noche se angustió el Faraón y todos sus ministros y Egipto entero. Hubo grandes llantos y gritos en todo el país, porque no había ninguna casa de los egipcios en donde no hubiera un muerto.
Entonces el Faraón llamó a Moisés y a Aarón, y les dijo: Salgan inmediatamente del país con todos los israelitas. Llévense todos sus animales. Váyanse enseguida y pidan por mí la bendición de Dios.
Los egipcios les insistían a los israelitas que se fueran, dándoles prisa para que salieran de su tierra, pues decían: Vamos a morir todos.
Los del pueblo de Israel se marcharon entonces de Egipto. Eran unos seiscientos mil, sin contar los niños. Llevaban además muchas ovejas, bueyes y gran número de animales.
Moisés tomó los huesos de José, pues Moisés se acordó que José había hecho jurar a sus hermanos, que cuando se fuesen de Egipto llevarían con ellos sus huesos.
Y en esta noche, Dios libró de la esclavitud al pueblo de Israel.
Después le dijo también a Moisés: Cada familia hebrea matará un animal de su ganado, y con la sangre de ese animal señalará las puertas de su casa. Y los hebreos cenarán esa carne asada al fuego, con un pan sin levadura, que se llama pan ácimo, y con lechugas amargas. Lo comerán de pie, con un bastón en la mano. Esta noche la recordaréis siempre. Es la Pascua , el paso de Dios.
Aquella noche se angustió el Faraón y todos sus ministros y Egipto entero. Hubo grandes llantos y gritos en todo el país, porque no había ninguna casa de los egipcios en donde no hubiera un muerto.
Entonces el Faraón llamó a Moisés y a Aarón, y les dijo: Salgan inmediatamente del país con todos los israelitas. Llévense todos sus animales. Váyanse enseguida y pidan por mí la bendición de Dios.
Los egipcios les insistían a los israelitas que se fueran, dándoles prisa para que salieran de su tierra, pues decían: Vamos a morir todos.
Los del pueblo de Israel se marcharon entonces de Egipto. Eran unos seiscientos mil, sin contar los niños. Llevaban además muchas ovejas, bueyes y gran número de animales.
Moisés tomó los huesos de José, pues Moisés se acordó que José había hecho jurar a sus hermanos, que cuando se fuesen de Egipto llevarían con ellos sus huesos.
Y en esta noche, Dios libró de la esclavitud al pueblo de Israel.
Interessante. Grazie.
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